Torta de coco

Marisa
20 ago 2020
2 Min. de lectura

Actualizado: 24 ago 2020

El sabor incomparable del coco nos inspira calor, vegetación tropical, playa, verano...

Es una fruta que se ha puesto de moda. Lo podemos encontrar rallado, como aceite, azúcar, manteca, leche.

Tiene importancia nutricional ya que aporta antioxidantes, regula la presión sanguínea, reduce los triglicéridos, contiene fibras y minerales cono potasio, fósforo, magnesio, hierro y vitaminas A, C y B.

Es mucho mejor usar coco fresco para evitar contaminaciones. Aunque hoy en día, en el mercado, hay coco rallado con sello, sin gluten.

Particularmente me gusta fresco y además tomo el agua!!!

Aprendí a abrirlo viendo un video español y quede fascinada!

Primero hay que sacar el agua interna agujereando con un sacacorchos donde tiene tres "ojos" en uno de sus extremos. Vaciar el agua en un vaso, con un colador, es muy sabrosa.

Luego con un martillo damos golpes suaves pero firmes alrededor de su cáscara, por la parte más ancha, en la "línea del ecuador". Va a llegar el momento en que se empieza a agrietar y se abre en dos partes.

Con un cuchillito se va retirando la pulpa blanca, que tiene una piel marrón fácil de retirar.

Así nomás se puede comer como fruta o rallarlo y preparar esta torta que va intensificando su sabor con el paso del tiempo... si es que dura!!!

Ingredientes:

Coco fresco rallado 150g.

3 yemas

3 claras de huevo batidas a punto nieve

1 taza de harina de arroz

1 taza de fécula de mandioca

2 cucharaditas de bicarbonato de sodio

175g. de azúcar orgánico ( dos pocillos de café aprox.)

1 cucharadita de esencia de vainilla

3 cucharadas grandes de aceite

5 cucharadas grandes de leche

Preparación:

Tamizar la harina con la fécula. Colocarlas en un bowl con el coco rallado y el bicarbonato.

Aparte mezclar bien las yemas, el azúcar, el aceite y la esencia de vainilla. Agregar estos líquidos a los secos. Sumar de a poco las cucharadas de leche integrando todos los ingredientes.

Por último incorporar con movimientos envolventes las claras de huevo batidas a punto nieve.

Precalentar el horno.

Enmantecar y enharinar un molde de 24 cm.

Volcar en él la preparación.

Llevar a horno moderado 160º por 35 minutos aproximadamente.

Al retirar, descansar por 5 minutos y desmoldar sobre una rejilla.

Al día siguiente el sabor es mucho más intenso.